"La mayoría de la gente es tan feliz como ha decidido serlo"
Abraham Lincoln.
No es lo que acontece en nuestras
vidas lo que
determina nuestra
felicidad, es como reaccionas ante lo que sucede...
Incluso perder el
control en determinadas situaciones es una
decisión, dejamos que nos domine la ira, el enojo, la frustración o la impotencia, y es cuando se pierde el
control de uno mismo...
Sin embargo
ser feliz no siempre es fácil. De hecho puede ser uno de nuestros más grandes retos y, en ocasiones, exige de nosotros toda la determinación, disciplina y tenacidad de que somos capaces. Tener
madurez quiere decir ser responsables de nuestra propia
felicidad y optar por concentrarnos más en lo que tenemos, que en nuestras carencias.
"La mayoría de la gente es tan feliz como ha decidido serlo"
Necesariamente estamos al mando de nuestra
felicidad, porque tenemos la capacidad y el preciado libre albedrío de elegir nuestros pensamientos. Nosotros engendramos nuestros propios pensamientos; para ser felices tenemos que ocupar nuestro
cerebro en pensamientos agradables, positivos, llenos de ilusiones, esperanzas y Fe, estar conscientes de lo que no se tiene, pero la certeza de que tarde o temprano llegará.
Sin embargo con cuánta frecuencia ignoramos los cumplidos y en cambio recordamos los comentarios hostiles, durante semanas enteras. Si permitimos que una experiencia negativa o un comentario desagradable ocupen nuestra mente sufriremos las consecuencias. Uno tiene el control de nuestra propia mente, tan solo porque es parte de nuestro ser.
Cuantos de nosotros recordamos los
cumplidos durante escasos minutos y los insultos durante años; a veces nos volvemos recolectores de basura, llevando inmundicias de años atrás, eso es un obstáculo para poder sacar a flote los pensamientos agradables, gratos y amenos que nos proporcionan un estado de salud mental sano y equilibrado. Es posible oir decir a una mujer no se me olvida que Fulano me dijo en el año de 1983 gorda y estupida; se olvidará de los
cumplidos que le dijeron ayer, pero recolecta la basura de 1983.
Para que esperar a
ser feliz mañana, o cuando me gradue, o cuando me case, o cuando llegue la persona adecuada a mi
vida, o cuando me jubile, o cuando vengan a visitarme mi hijo, o cuando sea millonario, o..... aplazamos la
felicidad, para cuando suceda algo que deseamos o anhelamos, se ignora que la
felicidad se tiene en una
decisión a pesar de las circunstancias que estén aconteciendo. Hay momentos en mi propia
vida que estoy harta de adversidades que han llegado sin avisar, pero aún con todo me he levantado con
determinación diciendo ¡
basta ya! no voy a relamerme las heridas sin hacer nada,
decido hoy mismo, en este momento de tomar el
control de mi vida, porque yo gobierno en ella y
decido ser feliz a pesar de la escacés, perdidas e inconvenientes que han llegado,
decido tomar las fuerzas necesarias para hacer frente a lo que está por delante, pero con una buena actitud... de verdad es sorprendente, se nota el cambio, como mejoran las cosas y se elevan nuestras capacidades y potencial.
Ser feliz puede representar gran esfuerzo y constancia, pero la recompensa es superior, mejoramos nuestra calidad de
vida. Para
ser feliz tenemos que encontrar el lado positivo a las cosas. Donde alguien ve una ventana sucia otra admira un bello paisaje. Tú
decides lo que quieres admirar y que es lo que quieres pensar.
"La mayoría de la gente es tan feliz como ha decidido serlo"
Abraham Lincoln.
Mónica Núñez Soberanes.