Algo para recordar..
Este año que va transcurriendo ha sido un tanto duro y complicado para mi en distintas áreas de mi vida, se presentó una mezcla de matices oscuros, grisáceos, pero también algunos tonos cálidos apastelados no puedo quejarme.. no hay más desgaste que las preocupaciones y contrariedades que me muestra la vida, veo que mientras más cargo con un problema más pesado se me va haciendo, y va comiendo mis energías, estoy convencida que las cosas no puedo tomarlas demasiado en serio, si busco un poco de humor me ayuda a sobrellevar mi día a día, cabe decir que hay momentos en que las cosas requieren responsabilidad y seriedad, no lamentos; las decisiones que puedo tomar hoy son tan importantes para librar batallas mañana, pues mi vida puede ser como yo quiero que sea, depende de la fuerza que emane mi fuero interno, el coraje a las adversidades que llegan sin avisar.. Me he dado cuenta que en esos momentos grises, dentro de mi hay infinitas respuestas para mejorar las situaciones.. La vida nadie la tiene contada, hay que vivírla intensamente, disfruto al máximo la convivencia con cada persona buena que llega en mi camino, pues un amigo es una sabia inversión, ya que es como oro molido poder compartir las mismas cosas de interés, risas, palabras de complicidad, una poesía o una canción, un dibujo, una comida o un café, momentos llenos de agradables sensaciones..
En cada amanecer hay un ocaso donde puedo contar no solo lamentos, también suele llegar cálido consuelo en ese momento que más lo necesitaba, esa persona que se acordó de mi mandando un mensaje para saludarme y querer saber cómo estoy, alguien que puede comprender mi silencio con lágrimas en los ojos y no se atreve a preguntar, solo prestarme sus brazos para recostar mi alma herida diciéndome: eres una mujer única, tu presencia es un regalo para este mundo, y es en el momento preciso cuando esas palabras sanan el rechazo, ese sentido de culpabilidad recriminándome ¿qué hice mal, qué fue lo que provocó esto? siendo dura conmigo misma exagerando mis faltas o mis hechos, como si hubiera hecho algo para merecer el rechazo que estoy experimentando, y me doy cuenta que nada puedo controlar, las personas reaccionan como quieren hacerlo, sienten como vienen las situaciones y se van de tu vida porque quizás ya no vale la pena estar ahí ya no hay nada que aportar.. cualquiera que sea la respuesta.. ¿qué puedo hacer?... nada, solo dejar que las cosas caigan por su propio peso, y que el puzzle de la vida se vaya completando poco a poco, seguro que vendrá una agradable sorpresa..
¡Feliz fin de semana!!
Algo para recordar..
Mónica Núñez Soberanes.
Narras experiencias que nos son comunes. Sin duda, nuestra apertura al mundo y sus efectos define el modo como nos enfrentamos a él, los aprendizajes que obtenemos y la capacidad para fabricar herramientas que nos permitan lidiar las futuras batallas. Gracias por estta drua reflexión, Mónica. Feliz fin de semana.
ResponderEliminarGracias Ma. Eugenia, a ti que siempre estás aquí leyéndome, muy cierto lo que escribes, tenemos la capacidad para fabricar herramientas que nos permiten lidiar las futuras batallas.. aprendemos de las desavenencias eso nos hace cargar el estandarte de la victoria.. Un beso, también feliz fin de semana.
EliminarMuy bueno es un levanta muertos. Abrazos y besos
ResponderEliminarMuy bueno es un levanta muertos. Abrazos y besos
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