sábado, 29 de marzo de 2014

Gritar en silencio..

La Soledad Social..



Delicia del Alma


En mi redacción anterior describía la soledad cuando hay una perdida de un ser querido, también hay otros tipos de soledad en nuestra sociedad, como la soledad social.

La soledad social, es la de quien apenas habla más que con su familia, sus compañeros de trabajo y sus vecinos es una soledad muy común en este mundo nuestro. Nos sentimos incapaces de contactar con un mínimo de confianza con quienes nos rodean, tememos a que nos rechacen. Plantamos un muro a nuestro alrededor, nos encerramos en nuestra pequeña célula (en ocasiones, incluso unipersonal) y vivimos el vacío que nosotros mismos creamos y que justificamos con planteamientos como "no me entienden", "la gente sólo quiere hacer daño", "para lo único que les interesas es para sacarte algo", "cada vez que confías en alguien, te llevas una puñalada". Si la soledad es deseada nada hay que objetar, aunque la situación entraña peligro: el ser humano es social por naturaleza y una red de amigos con la que compartir aficiones, preocupaciones y anhelos es un cimiento difícilmente sustituible para asentar una vida feliz. Es una meta difícil y las estructuras y hábitos sociales de nuestra civilización frenan este empeño de hacer y mantener amistades, pero merece la pena empeñar lo mejor de nosotros en el intento.

Delicia del Alma
Esa soledad no deseada puede convertirse en angustia, si bien algunos se acostumbran a vivir solos. Se revestirá esta actitud de una apariencia de fortaleza, autosuficiencia, agresividad o timidez. Y todo, para esconder la inseguridad y el miedo a que no se nos quiera o no se nos respete.


Hay también otras soledades indeseadas, como esas a las que se ven abocadas personas mayores, amas de casa, o quienes muestran una orientación sexual no convencional, o quienes sufren ciertas enfermedades, incapacidades físicas o psicológicas o imperfecciones estéticas.

Un estado transitorio, nada mas.

La soledad es una situación que hemos de aspirar a convertir en transitoria y que conviene percibir como no forzosamente traumática. Podemos mutarla en momento de reflexión, de conocernos a fondo y de encontrarnos sinceramente con nuestra propia identidad. Hay un tiempo para comunicarnos con los demás y otro (que necesita de la soledad) para establecer contacto con lo más profundo de nosotros mismos. Hemos de "hablar" con nuestros miedos, no podemos ignorarlos ni quedarnos bloqueados por ellos. Es conveniente que, en ocasiones, optemos por la soledad. En suma, equilibremos los momentos en que nos expresamos y atendemos a otros, y los que dedicamos a pensar, en soledad, en nuestras propias cosas.

Pero ¿cómo podemos vencer la soledad no deseada?..

Identificar, qué tipo de soledad es la que estamos sufriendo y a qué circunstancias se debe. (Diagnóstico)

Aprender a conocernos bien, Dejemos a un lado el miedo a mirar dentro de nosotros, y afrontemos la necesidad de saber cómo somos: nuestras ilusiones y ambiciones, limitaciones y miedos, quién quiero ser, cómo me ven, cómo me veo...

Tratar con nuestra timidez y tomar la iniciativa para conseguir nuevas relaciones. Establezcamos qué personas nos interesan, y elaboremos una estrategia para contactar con ellas.

No hay nada que perder, el miedo al rechazo es un freno para entablar nuevas amistades o amores. El objetivo es importante, valdrá la pena arriesgarnos.

Dejar de sentirnos victimas, cuando uno se siente víctima acaba siéndolo, el mundo resulta en ocasiones cruel, vulgar y materialista, de acuerdo. Pero seguro que hay otras personas que pueden estar deseando conocer a alguien como nosotros.

Encerrarnos en nosotros mismos es reconocer la derrota. A la mayoría la soledad nos hace daño, y nos sienta mejor tener con quién hablar, intimar y a quién querer.

No somos tan raros como a veces pensamos, no hay más que hablar en profundidad y confianza con cualquier persona para comprobarlo. Podemos "llenar" a más gente de la que creemos y nos pueden resultar atractivas muchas personas que tenemos muy cerca.



Delicia del Alma

La Soledad Social
Mónica Núñez Soberanes.


viernes, 21 de marzo de 2014

Gritar en Silencio.. Soledad.



"LA AUSENCIA DE UN SER QUERIDO"


Delicia del Alma




Delicia del Alma
Cuando (por separación en la pareja, fallecimiento de un ser querido u otra causa) desaparece de nuestra vida alguien a quien hemos amado o que ocupaba un espacio importante en nuestra vida cotidiana, nos invade una particular sensación de soledad, un vacío, una nada enmudecida que nos sumerge en la tristeza y la desesperanza. Hemos de sobrellevar la dolorosa percepción de soledad, de ausencia de una persona insustituible. Nos vemos perdidos y sin referencias en las que antes nos apoyábamos para afrontar la vida.

Somos seres sociales que necesitamos de los demás para hacernos a nosotros mismos. Y no sólo para cubrir nuestras necesidades de afecto y desarrollo personal, sino también para afianzar y revalidar nuestra autoestima, ya que ésta se genera cada día en la interrelación con las personas que nos rodean.

La pérdida es irreemplazable pero no debe ser irreparable. Ese hueco, esa silueta suya, quedará ahí en nuestros recuerdos, pero si nos permitimos sentir la tristeza y nos proponemos superarla a base de confianza en nosotros mismos, podremos reunir fuerzas para establecer nuevas relaciones que cubran al menos parcialmente ese déficit de amor que la ausencia del ser querido ha causado. Hemos de intentar que la carencia de esa persona no se convierta en una carencia general de relaciones. Esta soledad es dolorosa, pero puede convertirse en positiva si la interpretamos como oportunidad para aprender a vivir el dolor sin quedarnos bloqueados. Y para generar recursos y habilidades para continuar transitando satisfactoriamente por la vida. Debemos interiorizar y controlar el dolor, sabiéndolo parte inherente a la vida, aprendiendo a no temerlo y a no mantenernos al margen del sufrimiento como si de una debilidad o incapacidad se tratara. Quien sabe salir del dolor está preparado para disfrutar la plenitud que nos otorga la vida en todos sus matices y en momentos venideros.
Este tema es un poco extenso, que lo iré describiendo en las siguientes redacciones, hasta llegar a la conclusión de poder superar la soledad no deseada.

"La ausencia de un ser querido"
Mónica Núñez Soberanes.

sábado, 15 de marzo de 2014

Así vamos marcando la vida...

Así vamos marcando la vida...



Delicia del Alma


Hace poco estaba leyendo un artículo, que Denver en Colorado se desplaza unos 40 cm. cada 10 años, parece poco su desplazamiento, pero en realidad es mucho en 10 años. Las montañas Rocosas se formaron así y de ese modo la tierra cambia, pienso que no se puede cambiar todo de golpe, hay que hacerlo poco a poco. Las decisiones que adoptamos siempre deben de ir bien encaminadas. Es como cambia el mundo paulatinamente, así vamos marcando la vida, un poco cada año, esto es algo que está en mi mente.
Hace poco mi mejor amiga me escribió para decirme que su padre murió, y que su madre subió a facebook un pequeño poema que encontró entre las cosas de su padre y dice que expresaba lo que su madre sentía en ese momento....: 
-pues resulta querida amiga que ese poema es tuyo.. ¿cómo llegó ahí, y desde hace cuánto tiempo?.. no lo sabemos, pero fué de consuelo para mi mamá, ya te lo compartire y quiza tu recuerdes cuando lo escribiste pues tenia tu nombre, y es muy bello. Te lo voy a enviar, recibe un beso de parte de mi mama y por supuesto uno mio tambien. Dios te Bendice Mony..
Para mi fué una noticia muy triste por la perdida tan valiosa, vinieron recuerdos muy gratos, aunque perdí contacto varios años con sus padres, siempre los he llevado en mis más bellos recuerdos.., fueron unas personas muy sabias, cultas, sensatas y valiosas, me trataron con mucho cariño, me tenían en gran estima y valor . Recuerdo que el papá admiraba mi afición a salir a correr varios kilómetros, a mi amiga y a mi nos decía de una forma cariñosa "las marcianitas", por hablar de cosas profundas, era adorable al igual que su esposa, ella me tenía cautivada con su arte culinario.... a eso me refiero en el principio de la lectura, con lo poquito que hacemos se va haciendo el desplazamiento con los años, vamos marcando la vida, y la vida se va formando como las montañas rocosas, dejando huella en algunas personas que amamos.. Aquí les dejo este pequeño poema que hice, en ese entonces estaba pasando tiempos difíciles y se los compartí a esta adorable familia.



"Hoy he puesto una firme decisión"... en mi corazón, en la plenitud de mi esperanza, en el telar de cada día que pasa, en la semilla que siembro, y el fruto que cosecho, en la hiel que derrama mi dolor, en las sombras del olvido, en lo que admiro y suspiro, de un atardecer y del anochecer, en la quietud de mis más profundas cavilaciones, en la profundidad que murmura el cielo, en el primer Verbo de Dios hecho carne y sangre en la mano de mi alfarero, en la quietud que cubre mi soledad por tener una hermosa comunión contigo mi Señor.



Delicia del Alma
Así vamos marcando la vida..
Mónica Núñez Soberanes.



sábado, 8 de marzo de 2014

Flan de Vainilla y Queso


"Flan de Vainilla y Queso" 



Delicia del Alma




Ingredientes
  • 4 huevos medianos
  • 600 ml. Batido de vainilla
  • 95 gr. Azúcar
  • 100 gr. Queso crema (puedes poner ligth)
  • 1 Cucharada sopera aroma de vainilla
  • Caramelo líquido, podéis hacerlo casero, en un recipiente para lumbre quemas media taza de azúcar, se le agrega un cuarto de taza de agua caliente se reduce un poco a que quede consistente.



Preparación

Calentar el horno a 180º calor arriba y abajo.
En un bol, ponemos todos los ingredientes y batimos bien con la batidora. Poner en las flaneras caramelo líquido en el fondo y llenar con la mezcla. En una fuente apta para el horno ponemos agua e introducimos la flaneras. Tiene que tener cómo 2/3 dedos de agua aprox. Meter al horno hasta que cuajen, unos 20 minutos. Dejar fuera dentro la fuente con el agua, otros 5 minutos más, sacar y dejar enfriar. Guardar en el frigo, y listo ya está, fácil de hacer y están muy buenos.. Que lo disfruten.




Delicia del Alma

Flan de Vainilla y Queso
Mónica Núñez Soberanes.